Por fin nos hemos quitado una espinita de encima. Hemos subido al hueso por el lomo, eso si con mucho miedo. Ambientillo y muchos alejes en un día explendido. Mariano subió de primero varios largos y Edu le dio al tramo final.
Un hito importante en los muros de la Pedriza.
En la foto se nos ve felices después de haber completado la vía.
A ver si le damos a la pared de Santillana.